La Senadora Judith Fortsmann participo de debate de Consenso Bicentenario

GACETILLA DE PRENSA
En el día de ayer se realizó un debate en la Asociación Argentina de Aeronavegantes organizado por Consenso Bicentenario en el marco de una serie de conferencias que realizará la agrupación.
C.B. es una corriente político social dentro del Frente Para la Victoria inspirada en la convocatoria realizada por la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner para que esa conmemoración "sea una bisagra en la historia de los argentinos, que nos encuentre integrados en un proyecto común donde como sociedad podamos realizarnos individual y colectivamente"
En dicho contexto expuso la Senadora Nacional por el PJ-FPV por la Pcia. de Santa Cruz Selva Judith Forstmann acompañada por la Lic. en trabajo Social Patricia Cuesta. Ambas abordaron la problemática "Política y mujer"
Participaron en otros paneles:

Economía social:
Dr. Gabriel Monzón
Política y gestión legislativa:
Jorge Spitagliere (concejal -San Miguel- Pcia. de Bs. As. FPV)
Dr. Raúl Esteban (Concejal- Morón- Pcia. de Bs. As- del FPV)
Al respecto la legisladora reivindicó al Partido Justicialista como el espacio político organizado que siempre le dio participación a la mujer mucho antes de la ley de "Cupo Femenino". En ese sentido reivindicó la ley 13010 del Voto Femenino promulgada en 1947 no solo como la ley habilitante para dicho derecho sino como impulsora del ejercicio de ciudadanía en un gobierno que impulsaba todos los derechos, como los conquistados mediante el "Estatuto del Peón", los derechos de la ancianidad y de los niños, la ley de aguinaldo y otros. Instrumentos tendientes a construir una Comunidad Organizada.
Reivindicó el papel de Eva Perón, de quien recordó que tuvo dos programas políticos en radio, como difusora de los derechos de las mujeres. Pero quien también le habló a los hombres sobre esos derechos.
Dijo Evita, durante los debates para la sanción de la ley 13010: "La mujer argentina debe ser escuchada porque la mujer argentina supo ser aceptada en la acción. Se está en deuda con ella. Es forzoso establecer pues, esa igualdad de derecho ya que se pidió y se obtuvo, casi espontáneamente, esa igualdad en los deberes"
Destacó que la mujer, cuando busca el poder político no lo gana para sí sino para los demás.
Reseño la larga lucha que la precedió: Macacha Güemes, Juana Azurduy, TTe. Cnel. al mando de 10000 hombres, Manuela Pedraza, Martina Céspedes, Juana Manso. Mujeres ignoradas o deformadas por la historia liberal que además es androcéntrica, portadora de una visión masculina.
Una historia que no nos habla de lo realmente pasó y del papel que cumplió en ella la mujer.
También reseñó las huelgas en Nueva York en 1857 de las obreras por la jornada de 12hs., la propuesta de Clara Zetkin de conmemorar el día de "la mujer" el 8 de marzo en homenaje a las trabajadoras asesinadas en la fabrica Cotton; el primer congreso feminista organizado en 1910 en nuestro país por Alicia Moreau de Justo y Cecilia Grierson; la experiencia del voto simulado de mujeres en 20 mesas en 1920 (no tenía valor efectivo), así como los 22 proyectos presentados entre 1926 y1946, discutidos por hombres en el Congreso de La nación.
"Tenemos que terminar con la reproducción de esa visión centrada en el hombre también entre nosotras, también en nuestra casa" dijo la legisladora refiriéndose a los cuentos para chicos como "Caperucita, "La Bella Durmiente" y otros donde la mujer "o es estúpida total o es una arpía", o en las actitudes cotidianas de las madres que mandan a la nena a hacer la cama del hermano "porque está estudiando" valorizando el trabajo del varón por sobre sus congéneres; o en la política donde, más allá de leyes, las mismas mujeres posicionan a los hombres, a pesar de los méritos de las compañeras, en su propio desmedro.
Por eso reivindicó el lugar en las listas para las "compañeras militantes" que se ganaron su lugar por capacidad y trabajo
En el ámbito de la política actual destaco la presencia de 28 senadoras, 3 ministras nacionales y, por supuesto, la figura de la presidenta de todos los argentinos.
Finalmente abogó por un cambio cultural, no solo a través de la educación, de la enseñanza de una historia nacional y popular en vez de una liberal, como a través de los medios de comunicación, a los que criticó, y que hoy cumplen un papel muy importante.
Cerró preguntándose: ¿Está bien que las mujeres busquemos el poder?
A lo que respondió: "Está bien que tanto hombre como mujeres busquemos el poder porque ambas visiones no son iguales y necesitamos que se concilien".